Las mini-faldas hicieron su debut en los años 60, pero no golpearon la corriente principal hasta después de 1966. El crédito va para Mary Quant por llevar la mini-falda al público en general con dobladillos de 6 a 7 pulgadas (15,24 a 17,78 cm) arriba de la rodilla. Juvenil y divertida, la minifalda fue emparejada, por lo general, con unas botas go-go para acentuar la pierna.
En la actualidad son pocas las mujeres que usan minifaldas ya que son criticas por la sociedad.
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